16:21 | El sabio de corazón es llamado prudente, y la dulzura de labios aumenta el saber. |
18:4 | Aguas profundas son las palabras de la boca del hombre; y arroyo que rebosa es la fuente de la sabiduría. |
20:15 | Hay oro y multitud de piedras preciosas, pero joya más preciosa son los labios prudentes. |
25:15 | Con mucha paciencia se aplaca el príncipe, pues la lengua suave hasta los huesos quebranta. |
27:5 | Mejor es reprensión manifiesta que amor oculto. |
27:9 | Los aceites y perfumes alegran el corazón, y el cordial consejo del amigo, al hombre. |
Fuente: estudio personal del autor. Texto bíblico: Reina Valera Revisada (1995) Bible Text (Miami: Sociedades Biblicas Unidas, 1998).