En Santiago, Jacobo amonesta a sus lectores originales como si fueran niños.
1.16 | Mis queridos hermanos, no se engañen. |
1.19 | Mis queridos hermanos, tengan presente esto.... |
2.20 | ¿Pero quieres saber, hombre vano...? |
2.22 | ¿No ves...? |
3.10 | Hermanos míos, esto no debe ser así. |
4.13 | ¡Vamos ahora! |
5.1 | ¡Vamos ahora! |
Ben Witherington, We Have Seen His Glory. (Grand Rapids: Wm. B. Eerdmans, 2010)