Declaración teológica | ||
---|---|---|
7.21a | Falsa base de admisión al reino | No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, |
7.21b | Verdadera base de admisión al reino | sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. |
Narrativa acerca del juicio final | ||
7.22 | Los malvados han sido juzgados y ahora protestan con evidencia su derecho de entrar al reino | Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? |
7.23 | El Señor rechaza la evidencia de los malvados | Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad. |
Betz (542-543, que fue la fuente principal para el bosquejo arriba) nota que la narrativa en versículos 22-23 es concisa e incompleta. La narrativa asume que Jesús ya ha declarado la sentencia de estas personas, que no son dignas de entrar al reino, y ahora en v. 22 ellos apelan su decisión, ofreciendo como evidencia en contra, el hecho de que hicieron profecías, exorcismos y milagros en nombre de él.
Lucas 6.46 es el paralelo de este pasaje en la versión lucana del Sermón del Monte:
«¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo?».
Vemos que es paralelo con Mateo 7.21-23 por dos razones:
Dale C. Allison dice que las personas criticadas en este pasaje son los mismos falsos profetas de los versículos anteriores, 7.15-20. El bosquejo de Allison de Mateo 7.15-23 es:
7.15 | Advertencia contra los falsos maestros |
7.16-20 | Los malos hechos de los falsos maestros |
7.21-23 | El destino final de los falsos maestros |
Juan Stott, en cambio, dice que este pasaje se conecta con el siguiente pasaje, 7.24-27. Stott dice que ambos pasajes son la conclusión del sermón, y que ambos enfatizan la necesidad de obedecer las enseñanzas de Jesús.
7.21-23 | Primera mitad de la conclusión |
7.24-27 | Segunda mitad de la conclusión |
La decisión es difícil. A favor del argumento de Allison que son falsos profetas está el hecho de que estas personas hacen profecías, milagros y exorcismos. Sin embargo, pienso que la idea de 7.24-27 es más amplio que 7.15-20, y que está dirigido a todo potential discípulo de Jesús. Es una advertencia para todos. Así que me inclino a favorecer la posición de Stott.
De principio a fin el pasaje insiste que la obediencia a la voluntad de Dios será el criterio del juicio final:
Esta énfasis en la obediencia se conecta bien con 7.15-20, donde los falsos profetas son personas que no producen fruto, y con 7.24-27, donde la persona cuya casa cae es la persona que no pone en práctica las enseñanzas de este sermón de Jesús.
Para cualquier texto como este que enfatiza la necesidad de las buenas obras, debemos mencionar que no son las obras que justifican a la persona, sino la gracia de Dios, por medio la fe en Jesucristo. Sin embargo, la fe verdadera produce buenas obras. Las obras son la evidencia que uno tiene una fe genuina. La falta de buenas obras es evidencia que la fe de uno es una fe muerta (Santiago 2.14-26).
Betz y Allison parece tener la razón en decir que el problema de las personas rechazadas en 7.21-23 son personas que confiaron en las obras sobrenaturales que hicieron (profecías, milagros y exorcismos) como evidencia de su aprobación por Dios, y no las acompañaron con la obediencia a las enseñanzas morales de Jesús.
«ellos usan...sus experiencias carismáticas como sustitutos por su obediencia a Torá.»
- Betz, Hans Deter., (1995), 541.
En términos paulinos, estas personas rechazadas pusieron su confianza en los dones del Espíritu, y no produjeron el fruto del Espíritu. «...los fenómenos aparentemente sobrenaturales no son señales seguras de la fe salvadora.»
- Allison, Dale C., (1999), 168.
Podemos notar ideas similares en 1 y 2 Corintios:
Stott no convence al present autor cuando dice que 7.21-23 se trata de personas que sustituyen una profesión verbal por la obediencia, y que 7.24-27 se trata de personas que sustituyen su conocimiento intelectual por la obediencia.
Allison piensa que las profecías, los milagros y los exorcismos son falsos. Los compara con los milagros que hicieron los magos de Faraón en el libro de Éxodo, y menciona las profecías en el NT acerca de falsos milagros para engañar al público.
En lugar de asumir con Allison que estos son falsos milagros, podríamos suponer que Dios a veces hace milagros por medio de personas que profesan tener fe en Jesús y que actúan en el nombre de él. Pero estos milagros no son ninguna garantía de la elección y la salvación de la persona, y la persona no debe presumir de que es salva simplemente porque Dios la usa para hacer cosas sobrenaturales.
Betz dice que las personas criticadas en este pasaje no son los falsos profetas sino las personas engañadas por los falsos profetas. No creo que haya necesidad de hacer esta conexión entre los falsos profetas de 7.15-20 y las personas rechazadas en 7.21-23. Es una advertencia general para cualquier persona que piensa confiar en su habilidad de hacer milagros como evidencia de su salvación en lugar de obedecer la voluntad moral de Dios.
Debemos notar la alta cristología en Mateo 7.22: Jesús dice que él estará presente en el juicio final, y que tendrá autoridad como Juez.
Betz (551) dice que las palabras «Nunca os conocí» en v. 23 vienen de un contexto legal: los malvados piden que Jesús habla a favor de ellos ante Dios Padre. Pero en el mundo antiguo, nadie podía representar a alguien como abogado a menos que lo conociera antes. Si esta interpretación es correcta, Jesús les dice que no los conoce, porque nunca fueron seguidores verdaderos de él.
Las palabras en v. 23, «apartaos de mí, hacedores de maldad» son un eco de Salmo 6.8:
Apartaos de mí, todos los hacedores de iniquidad;
Ojo: Este artículo debe considerarse 'en construcción' - puede ser que el autor añada más información en el futuro.