El amor +
- Enviaron, pues, las hermanas para decir a Jesús: Señor, he aquí el que amas está enfermo. (Juan 11.3)
- Y amaba Jesús a Marta, a su hermana y a Lázaro. (Juan 11.5)
- Dijeron entonces los judíos: Mirad cómo le amaba. (Juan 11.36)
- Antes de la fiesta de la pascua, sabiendo Jesús que su hora había llegado para que pasase de este mundo al Padre, como había amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin. (Juan 13.1)
- Y uno de sus discípulos, al cual Jesús amaba, estaba recostado al lado de Jesús. (Juan 13.23)
- Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. (Juan 13.34)
- El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él. (Juan 14.21)
- Mas para que el mundo conozca que amo al Padre, y como el Padre me mandó, así hago. Levantaos, vamos de aquí. (Juan 14.31)
- Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor. (Juan 15.9-10)
- Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado. Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos. (Juan 15.12-13)
- Cuando vio Jesús a su madre, y al discípulo a quien él amaba, que estaba presente, dijo a su madre: Mujer, he ahí tu hijo. (Juan 19.26)
- Entonces corrió, y fue a Simón Pedro y al otro discípulo, aquel al que amaba Jesús, y les dijo: Se han llevado del sepulcro al Señor, y no sabemos dónde le han puesto. (Juan 20.2)
- Entonces aquel discípulo a quien Jesús amaba dijo a Pedro: ¡Es el Señor! Simón Pedro, cuando oyó que era el Señor, se ciñó la ropa (porque se había despojado de ella), y se echó al mar. (Juan 21.7)
- Volviéndose Pedro, vio que les seguía el discípulo a quien amaba Jesús, el mismo que en la cena se había recostado al lado de él, y le había dicho: Señor, ¿quién es el que te ha de entregar? (Juan 21.20)
La angustia y el acto de clamar +
- Y tomando a Pedro, y a los dos hijos de Zebedeo, comenzó a entristecerse y a angustiarse en gran manera. (Mateo 26.37)
- Cerca de la hora novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo: Elí, Elí, ¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? (Mateo 27.46)
- Y tomó consigo a Pedro, a Jacobo y a Juan, y comenzó a entristecerse y a angustiarse. (Marcos 14.33)
- Y a la hora novena Jesús clamó a gran voz, diciendo: Eloi, Eloi, ¿lama sabactani? que traducido es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? (Marcos 15.34)
- De un bautismo tengo que ser bautizado; y ¡cómo me angustio hasta que se cumpla! (Lucas 12.50)
- Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra. (Lucas 22.44)
- Jesús entonces, al verla llorando, y a los judíos que la acompañaban, también llorando, se estremeció en espíritu y se conmovió (Juan 11.33)
- Ahora está turbada mi alma; ¿y qué diré? ¿Padre, sálvame de esta hora? Mas para esto he llegado a esta hora. (Juan 12.27)
El asombro +
- Al oírlo Jesús, se maravilló, y dijo a los que le seguían: De cierto os digo, que ni aun en Israel he hallado tanta fe. (Mateo 8.10)
- Y estaba asombrado de la incredulidad de ellos. Y recorría las aldeas de alrededor, enseñando. (Marcos 6.6)
- Al oír esto, Jesús se maravilló de él, y volviéndose, dijo a la gente que le seguía: Os digo que ni aun en Israel he hallado tanta fe. (Lucas 7.9)
El celo +
- Entonces se acordaron sus discípulos que está escrito: El celo de tu casa me consume. (Juan 2.17)
La compasión +
- Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor. (Mateo 9.36)
- Y saliendo Jesús, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, y sanó a los que de ellos estaban enfermos. (Mateo 14.14)
- Y Jesús, llamando a sus discípulos, dijo: Tengo compasión de la gente, porque ya hace tres días que están conmigo, y no tienen qué comer; y enviarlos en ayunas no quiero, no sea que desmayen en el camino. (Mateo 15.32)
- Entonces Jesús, compadecido, les tocó los ojos, y en seguida recibieron la vista; y le siguieron. (Mateo 20.34)
- Y Jesús, teniendo misericordia de él, extendió la mano y le tocó, y le dijo: Quiero, sé limpio. (Marcos 1.41)
- Y salió Jesús y vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tenían pastor; y comenzó a enseñarles muchas cosas. (Marcos 6.34)
- Tengo compasión de la gente, porque ya hace tres días que están conmigo, y no tienen qué comer; (Marcos 8.2)
- 13Y cuando el Señor la vio, se compadeció de ella, y le dijo: No llores. (Lucas 7.13)
Conmovido +
- Jesús entonces, al verla llorando, y a los judíos que la acompañaban, también llorando, se estremeció en espíritu y se conmovió (Juan 11.33)
- Jesús, profundamente conmovido otra vez, vino al sepulcro. (Juan 11.38)
El enojo, la indignación +
- Y los ojos de ellos fueron abiertos. Y Jesús les encargó rigurosamente, diciendo: Mirad que nadie lo sepa. (Mateo 9.30)
- Entonces le encargó rigurosamente, y le despidió luego (Marcos 1.43)
- Jesús se les quedó mirando, enojado y entristecido por la dureza de su corazón, y le dijo al hombre: - Extiende la mano. (Marcos 3.5, NVI)
- Viéndolo Jesús, se indignó, y les dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios. (Marcos 10.14)
El acto de gemir, suspirar +
- y levantando los ojos al cielo, gimió, y le dijo: Efata, es decir: Sé abierto. (Marcos 7.34)
- Y gimiendo en su espíritu, dijo: ¿Por qué pide señal esta generación? (Marcos 8.12)
El gozo +
- En aquella misma hora Jesús se regocijó en el Espíritu, y dijo: Yo te alabo, oh Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y entendidos, y las has revelado a los niños. (Lucas 10.21)
- Lázaro ha muerto; y me alegro por vosotros, de no haber estado allí, para que creáis; mas vamos a él. (Juan 11.15)
- Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. (Juan 15.11)
- Pero ahora voy a ti; y hablo esto en el mundo, para que tengan mi gozo cumplido en sí mismos. (Juan 17.13)
La tristeza, el acto de llorar +
- Y tomando a Pedro, y a los dos hijos de Zebedeo, comenzó a entristecerse y a angustiarse en gran manera. Entonces Jesús les dijo: Mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí, y velad conmigo. (Mateo 26.37-38)
- Y tomó consigo a Pedro, a Jacobo y a Juan, y comenzó a entristecerse y a angustiarse. Y les dijo: Mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí y velad. (Marcos 14.33-34)
- Y cuando llegó cerca de la ciudad, al verla, lloró sobre ella (Lucas 19.41)
- Jesús lloró. (Juan 11.35)